Page 18 - index
P. 18
(Entra ISMENA.)
CREONTE:
¡Oh tú que, como una víbora, arrastrándose cautelosamente en mi hogar,
bebías, sin yo saberlo, mi sangre en la sombra! ¡No sabía yo que criaba dos
criminales dispuestas a derribar mi trono! Vamos, habla, ¿vas a confesar tú
también haber participado en los funerales, o vas a jurar que no sabías
nada?
ISMENA:
Sí, soy culpable, si mi hermana me lo permite; cómplice soy suya y comparto
también su pena.
ANTÍGONA (Vivamente.):
Pero la Justicia no lo permitirá, puesto que has rehusado seguirme y yo no te
he asociado a mis actos.
ISMENA:
Pero en la desgracia en que te hallas no me avergüenza asociarme al peligro
que corres.
ANTÍGONA:
Hades y los dioses infernales saben quiénes son los responsables. Quien me
ama sólo de palabra, no es amiga mía.
ISMENA:
Hermana mía, no me juzgues indigna de morir contigo y de haber honrado al
difunto.
ANTÍGONA:
Guárdate de unirte a mí muerte y de atribuirte lo que no has hecho. Bastará
que muera yo.
ISMENA:
Y ¿qué vida, abandonada de ti, puede serme aún apetecible?
ANTÍGONA:
Pregúntaselo a Creonte, que tanta solicitud te inspira.
ISMENA:
¿Por qué quieres afligirme así, sin provecho alguno para ti?
ANTÍGONA:
Si te mortifico, ciertamente no es sin dolor.
ISMENA:
¿No puedo al menos ahora pedirte algún favor?
18