2017-10-20
Los desarrolladores que quieren detener a los tramposos en sus juegos de Windows obtienen un poco de ayuda adicional a nivel de sistema de Microsoft a través de TruePlay, una nueva API que se implementa a través de la Actualización de creadores de errores de Windows 10.
La característica, que ahora está documentada en el Windows Dev Center, permite a los desarrolladores priorizar fácilmente un juego como un proceso protegido, cortando algunos de los métodos de trampa más comunes al evitar esencialmente que los programas externos miren o alteren la memoria del juego. TruePlay también "monitorea [s] las sesiones de juego para conocer los comportamientos y las manipulaciones que son comunes en los escenarios de fraude", y analiza los patrones de uso a nivel de sistema para encontrar posibles tramposos.
TruePlay solo está disponible para los desarrolladores que usan la controvertida Plataforma Universal de Windows, que Microsoft ha estado alentando a los desarrolladores a adoptar desde hace un tiempo. El sistema anti-trampas se puede aplicar a todo un juego o solo a ciertas partes, por lo que los desarrolladores pueden controlar las trampas solo en partidas multijugador, por ejemplo.
Los usuarios de Windows tendrán que optar explícitamente por la monitorización de TruePlay a través de una configuración de sistema, que apareció por primera vez en versiones de previsualización como "Game Monitor" en junio. Sin embargo, los usuarios que no participan no podrán jugar con TruePlay implementado; como señala la página de configuración, "apagar esto puede limitar los juegos que puedes jugar".
Esa configuración intrincada parece ser un reconocimiento de las posibles implicaciones de privacidad de la protección TruePlay. Cuando se detecta una trampa en TruePlay, la información del sistema del usuario (presumiblemente anónima) se comparte con los desarrolladores para ayudarlos en sus esfuerzos contra el fraude. Como señala Microsoft, "para proteger la privacidad de los clientes, no se comparten ni transmiten datos hasta que se otorgue el permiso", y no se envía información hasta que "el procesamiento haya determinado que se haya producido una trampa".
Si bien los desarrolladores pueden configurar protecciones similares y monitoreo anticopia en versiones anteriores de Windows, la API TruePlay hace que dicha protección sea un proceso plug-and-play más optimizado. La protección integrada al sistema operativo también puede brindar a los desarrolladores cierta confianza adicional de que Windows está buscando posibles vectores de trampas en todo el sistema operativo a un nivel bajo. Dado los serios problemas de engaño que afectan a muchos juegos populares de PC actualmente, ese soporte extra de Windows no puede doler.